jueves, 21 de abril de 2011

El centinela de piedra


Por Josep Riera

Son muchos los que creen que el punto máximo de concentración de la singular energía que envuelve a la isla de Ibiza (Eivissa), el foco principal de esa fuerza enigmática que tantas personas (artistas, pintores, escritores, místicos...) afirman haber sentido y descubierto, es el escarpado y enigmático islote de es Vedrà. Con sus 385 metros de altura, de muros casi verticales e imponente aspecto, este islote ha sido comparado, entre otros ejemplos, con una catedral gótica que estuviera sumergida en las aguas. Miles de personas disfrutan cada año de la contemplación de esa impresionante mole de piedra, bien desde la cercana Cala d'Hort o, mejor aún, navegando en una embarcación por sus cercanías. Y muchos miles más de fotografías captadas por otras tantas cámaras, postales e imágenes que llegan a todo el mundo, dan fe del singular interés y atracción que es Vedrà despierta entre todos cuantos visitan la isla o en ella residen.



Dos imágenes del islote de Es Vedrà, situado frente a la costa de Eivissa

Hace miles de años, es Vedrà formaba una sola masa con la costa isleña, para separarse después, quedar frente a ella como un fabuloso centinela de piedra y convertirse, o al menos así se ha escrito reiteradamente, en un foco de irradiación magnética que envuelve y a la vez protege a la isla entera, dotándola de su aura de misterio. Repleto de grutas de difícil acceso, no parece pertenecer a este mundo. Psíquicos, parapsicólogos e investigadores que lo han visitado o han navegado por sus aguas, aseguran que el islote es un extraordinario acumulador de energía, al estilo de las pirámides de Egipto, del círculo de piedra de Stonehege (o bien otro monumento de similares características, aunque más modesto, como es el monumento megalítico de Ca Na Costa, en Formentera) o las estatuas de la isla de Pascua, por poner solamente algunos ejemplos.

En una de esas grutas, situada en la parte más elevada del islote, vivió retiros espirituales en diversas ocasiones a lo largo del siglo pasado un misionero carmelita, el padre Francisco Palau (fundador del monasterio de las Carmelitas Misioneras ubicado en la cercana localidad de es Cubells, Sant Josep). En una de las obras que escribió el padre Palau, hemos hallado numerosas referencias a extrañas visiones, experiencias vividas por éste en el islote, avistamientos de "damas de luz" y de "seres celestiales" que a la luz de los conocimientos actuales no pueden sino ser consideradas como encuentros o experiencias relacionadas muy directamente con el fenómeno ovni.

UN NOMBRE ANTIQUÍSIMO

El origen etimológico de este nombre aún es objeto de controversias. El fallecido historiador Joan Coromines, por ejemplo, sugería que quizás sea un derivado mozárabe de vitrum, vidrio; cita la versión (aceptada por otros autores) de que pudiera también proceder del latín veteranus y sobre esto último, considera sin ninguna base la suposición de que fuese epíteto de alguna divinidad pagana. Nosotros, sin embargo, hace años que trabajamos en la teoría de que el nombre "Vedrà" es una muestra evidente, amén de otras muchas, de la presencia e influencia de los ligures (llámeseles también, si se quiere, kimros, pues ambos antiquísimos pueblos formaron parte de un mismo primitivo pueblo, de origen indoario, que siglos más tarde daría origen a los celtas), en las Pitiüses. En la antigua lengua y cultura célticas, existe un vocablo idéntico al nuestro, Vedrà, y su significado no es otro que "caballo". Recuérdese, sin ir más lejos, la ciudad gallega (tierra de innegable herencia céltica) de "Ponte-Vedra".

Marinos y gentes de la mar avezadas desde siempre a la gigantesca silueta de Es Vedrà coinciden en confirmar el gran parecido de la mole rocosa con ese noble animal. Sobre todo, cuando se contempla demorando el Cap de Berberia, o bien desde el ancho canal que separa Eivissa y Formentera, hacia el Oeste. La visión de es Vedrà al amanecer, iluminado por los primeros rayos del sol naciente, hace que la impresión de un inmenso caballo emergiendo de las aguas sea del todo real. Así debieron contemplarlo aquellos navegantes del norte, hace más de tres mil años. Un pueblo, los ligures, cuya cultura y religión eran la piedra y cuyos animales predilectos eran el toro y el caballo. ¿Qué pensarían ante el pétreo coloso? Sin duda, creerían estar contemplando un dios, o la morada de los dioses. Pero hay más. En mapas cartográficos muy antiguos, es Vedrà tiene toponimias, primitivos nombres curiosos e intrigantes, como por ejemplo la denominación Baleran, o Beleran, o Beleren... Y no hay que olvidar que pueblos como los asirios, babilonios, cananeos o fenicios tuvieron a Baal-Bel como su principal dios. Un dios al que posteriormente ligures y celtas adoptaron y pasaron a denominar Belenos. Beltaine y Samhaine eran, a su vez, los dos festivales principales de los pueblos célticos, pues dividían el año en dos partes: el invierno y el verano. Por otra parte, en la mitología siria hay demonios o divinidades infernales con nombres tales como Beel-Zebub y Belfegor, mientras los fenicios temían a un espíritu llamado Belial. Estos nombres fueron posteriormente incorporados por la religión católica a la cohorte de seres infernales, con los mismos o muy parecidos nombres (Belcebú). Las semejanzas con Beleran-Belenos son más que evidentes. Otra denominación muy antigua dada al islote Vedrà fue también la de Arijum, que significa "eterno".

EN EL "TRIÁNGULO DEL SILENCIO"

En cualquier caso, toponimias aparte, además de por su evidente belleza y majestuosidad y por la impresión que causa en propios y extraños cuando se le contempla, es Vedrà es también centro de interés por las teorías que en torno a él se han venido publicando, especialmente las que hacen referencia a los avistamientos ovni y al controvertido "triángulo del silencio". Se ha sugerido que el islote podría formar, junto con su "hermano" e igualmente imponente Peñón de Ifach y la costa suroeste de Mallorca,un triángulo magnético, una "zona de silencio" similar a la del triángulo de las Bermudas. En aguas de es Vedrà las palomas mensajeras pierden el sentido de la orientación y no saben regresar al palomar, como bien saben y han comprobado los colombófilos. Se han producido y existen testimonios bien documentados de marineros y pescadores que aseguran haber visto objetos extraños pasar o navegar bajo sus embarcaciones, luces singulares entrando o saliendo de las aguas... e incluso hay quien defiende que, al ser una pirámide natural que irradia energía, los objetos volantes no identificados, que tanto han proliferado durante los últimos años en los cielos pitiusos, se aproximan a esa zona para aprovecharse de dicha energía magnética, o quizás para esconderse en las profundas y tranquilas aguas.

Se da, además, la singular circunstancia de que, en uno de los casos ovni más importantes de los muchos registrados en España, el "caso Manises" (cuando el 11 de noviembre de 1979 la cercanía de un ovni obligó a un avión comercial que se dirigía desde Palma de Mallorca a Tenerife a desviarse de su ruta y realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto valenciano de Manises), es Vedrà tuvo un importante protagonismo. En efecto, aunque hasta ahora este detalle era prácticamente desconocido -sólo el autor de estas líneas publicó algo al respecto en el Diario de Ibiza-, el punto más álgido del caso, el momento en que el ovni se acercó al Caravelle a una distancia mínima y estuvo "jugando" con el avión, subiendo y bajando de altitud durante al menos ocho minutos, tuvo lugar encima mismo de la vertical del islote Vedrà. La teoría de una base submarina de ovnis cerca del islote no es nueva y cada tanto tiempo vuelve a salir a la luz.

Además de todo lo ya comentado, es Vedrà tiene el atractivo añadido de contar de nuevo, tras muchos años de no haber habido ninguna, con rebaños de cabras salvajes, después de la repoblación de estos animales efectuada por las familias ibicencas propietarias del islote. Ver a las cabras saltando por las afiladas rocas o jugueteando al borde de los precipicios es un espectáculo de innegable belleza y majestuosidad para todo quien tiene ocasión de contemplarlo, desde cualquiera de las numerosas embarcaciones que surcan cada día esas aguas.

Quizás por todo ello, el famoso músico británico Mike Oldfield, que ha estado dos años viviendo en la isla (se construyó incluso una casa en la zona de es Cubells), no sólo dedicó al islote la portada de su penúltimo disco, "Voyager", sino que además aseguró que Eivissa había sido su fuente de inspiración principal para algunos de los temas de su última obra, "Tubular Bells III". Oldfield ha vuelto con estos trabajos a sus raíces, destacando la influencia de la cultura celta en su música. El músico reconoció al semanario ibicenco Proa que ignoraba que el nombre "Vedrà" fuera celta y su significado, y cuando le fue explicada brevemente la historia y leyenda mágica del islote, se mostró muy satisfecho. ¿Le inspiró es Vedrà, aunque fuera de forma inconsciente? En cualquier caso, es otro detalle que se añade a los muchos enigmas que envuelven a este fabuloso centinela de piedra frente a la costa ibicenca.

2 comentarios:

  1. qué montón de estupideces sobre el islote. en Eivissa estamos un poco hartos de que os inventéis nuestra historia con chorradas... y encima os atrevéis a teorizar. por cierto, las cabras son una plaga q está acabando con especies de flora endémica...

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  2. Gracias por tu comentario juanan. Dado que discrepas sobre lo que se comenta en el artículo, te invito a que concretes lo que dices que son estupideces. Aunque puede que a muchas personas no le parezca, la intención de este blog es proporcionar todo tipo de información, tanto a favor como en contra, sobre lo que se dice que pasa en nuestras islas relacionado con lo paranormal, así que sería muy interesante, e incluso provechoso, que pudieses ampliar tus afirmaciones para así tener más información sobre el tema y que todo el mundo pueda sacar sus propias conclusiones. Por cierto, el autor del artículo, Josep Riera, es de Ibiza, así que no creo que se le pueda negar el derecho a teorizar, derecho que todos tenemos, otra cosa es que las teorías sean correctas o no, cosa que el tiempo se encargará de demostrar, tanto a favor como en contra. Así que de nuevo reitero mi invitación para que concretes que es lo que está mal en el artículo de Josep y aportes el "otro punto de vista" sobre sus afirmaciones. Un saludo

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